Al igual que muchos sectores, el mercado audiovisual debió adaptarse a una nueva normalidad donde las interacciones en materia de compra-venta de proyectos se suceden a través de una pantalla. Vivimos tiempos donde gana la virtualidad en detrimento del contacto presencial y todo parece indicar que la conexión entre vendedores y compradores de proyectos audiovisuales tendrá un futuro híbrido: presencialidad y virtualidad.
Ralph HaiekLas encuestas dan cuenta de un modelo híbrido
Existen diferentes opiniones sobre si los mercados de cine y televisión deberían volver por completo a su formato físico anterior al aislamiento y bloqueo generado por la pandemia del coronavirus, o si deberían conservar algunos puntos en línea y hacer una transición a un modelo híbrido.
Aunque es cierto que el futuro se torna incierto, es muy probable que la condición dual de interacción continúe durante todo el 2021 dado que la mayoría de los compradores de películas aún no está dispuesta a viajar y exponerse a la pandemia.
Al menos esto demuestran los grandes festivales mundiales como es el caso del Festival de Cannes que ha lanzado eventos híbridos para este año: la parte de mercado del festival denominada marché du Film, se realizará en línea durante el mes de julio.
En el evento se incluirán cabinas virtuales para que se lleve a cabo la proyección de películas de las compañías de venta y pabellones digitales para organizaciones de financiamiento. De esta manera los vendedores podrán conectarse con compradores, organizar reuniones mediante videollamadas y generar relaciones de valor a través de la pantalla.
En palabras de Jérôme Paillard, “...una encuesta realizada por nosotros la semana pasada para distribuidores de todo el mundo revela que el 80% de ellos están interesados en un mercado en línea. Estamos recreando parte de la esencia de Cannes al ofrecer a los profesionales una plataforma eficiente y de vanguardia para proyectar películas, comprarlas, financiarlas o conocerlas".
¿Qué depara el futuro para los festivales y el mercado audiovisual frente a la nueva normalidad? La mejor opción parece ser un festival presencial luego de la realización de un mercado online, para que quienes deseen viajar puedan continuar charlas que se iniciaron virtualmente, asistir a proyecciones de cine y socializar.
Es que, no podemos negar que las conexiones que se producen en los encuentros físicos son imposibles de replicar en la virtualidad. Y aunque muchos promocionen la conveniencia de las reuniones online, las diferencias horarias y los problemas de comunicación están deteriorando las conexiones y la moral de la industria.
Para Juan Antonio Vilar, director del festival de Málaga “Los festivales han evolucionado, asumiendo el entorno virtual y trabajando con ello. Está claro que este fenómeno ha llegado para quedarse y la pandemia vivida ha terminado acelerando este desarrollo. Nosotros defendemos el modelo tradicional de nuestro festival que aúna de modo equilibrado la promoción y exhibición audiovisual con el evento social, simbolizado en nuestra popular alfombra roja. Este valor presencial nos ha definido siempre, como fiesta del cine y lugar de encuentro. Y es algo que, a nuestro juicio, debe continuar siendo así. Ello no quita la integración de salas virtuales para contenidos complementarios que nos permitan alcanzar a un público más amplio. Asimismo este formato online nos facilita en tiempos complejos para la movilidad la realización de los mercados y áreas de industria, más susceptibles de articularse por esta vía”.
Desde la perspectiva del comprador, los mercados online son eficientes y ágiles. Sin embargo, al final de cuentas puede resultar complicado evaluar adecuadamente los proyectos, leer los guiones y ver las proyecciones.
Es por ello que una brecha de pocos días entre virtualidad y presencialidad será capaz de promover conexiones fructíferas entre agentes de ventas y compradores.
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